En aquella mirada tan tierna,
En la que tú me hablabas,
Tuvo lugar un todo.
El tiempo pasaba sin sentir que se acababa,
Porque se iba fraguando el Amor
De manera delicada.
Besos, caricias hasta llegar al climax,
De manera pausada y tierna, delicada,
conociendo nuestros cuerpos sin premura.
Con mucha dulzura
Ambos así lo necesítabamos por respeto,
Aunque se daba pasión y frenesí.
Ambos así lo queríamos, por nuestro Amor
De otra manera no podría ser.
Hubo el infinito en cada instante,
Para fraguar el Amor, que nunca se terminó.
Buenos dias Maite.
ResponderEliminarAsí es bonito el amor lleno de tenura, bellos sentimientos hay hoy en tus letras.
Un abrazo
Ambar.
Hola, Maite:
ResponderEliminarAsí tan bonito como lo narras deberían ser todos los amores del mundo: Puros, sinceros, apasionados y eternos.
Un abrazo.
Hola Maite, lleno de ternura y belleza este poema que hoy compartes. Besos, cuidate amiga.
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