5 feb 2012

El niño y sus amigas...


Me dices que estás malito,
entonces te acuno, en tu cuna
moviéndola en vaivén calmito,
a ritmo pausado de tuna.

Tú lloras porque estás mustio,
te canto al son de la luna,
y ésta se enciende de brío,
callándote tú, tesoro mío.

Me miras con tu carita,
como si fueses chiquito,
pero eres grande nenito,
la cuna es pequeñita.

Te sigo arrullando a la una,
te vas quedando dormido
conmigo y nuestra amiga la luna,
que somos lo más querido.

4 comentarios:

  1. Realmente conmovedor. Gracias y felicidades.

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  2. Oh, qué descubrimiento acabo de hacer.¡Qué ternura de poema corto!
    Te felicito

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  3. Tierno poema,bellos "sweet" como decimos aqui en USA. Me encanto.
    Un abrazo,

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  4. Y aún dijera más de lunas:
    las que arbitran nuestra noche.
    Las peregrinas de día.
    Las nadie osa pisarlas.
    Las, ¡tan altas , que encandilan...
    Gracias igualmente por tu visitica, Teresa

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