28 mar 2012

La Hiedra...




La hiedra…





Pegadita a ti como la hiedra


en baile de palabras que embelesan


siempre en deleite juegan y besan


nunca como la ruda piedra.





En amores tuve algunos que besaban,


pero hacían daño y no cautivaban.


Un día los dejé sin rencor no siendo hiedra


despegándome de ellos sobre la tierra.





Renazco fundida en dulce escarcha


naciendo a un amor que espera


mientras mi razón y sin razón apunta a ella.





Desconozco que acontecerá en esta brega


en dulce espera que no espera


al ladito de la hiedra.







imanastur

27 mar 2012

Al Desamor...


Mi realidad, es que creí que me Amabas,
Pero hoy siento soledad,
Que se clava en lo más profundo del alma.

La Vida cuánto daño!
Hace a veces y,
No sé a dónde mirar.

Miro al frente y,
No te veo,
Ni siquiera mirando atrás.

Este Amor me consume, y
No quiero que sea real,
Sólo un mal sueño en mi soledad.

Ayeres que reviven en mí,
Y recuerdo con nostalgia.
Lo que una vez viví en mí,
Y en ti.

Me quedaré en la penumbra sin molestar,
Nunca más…

25 mar 2012

Hay Amores...




Hay amores...

Hay amores que sin saber el porqué,
se instalan de repente en nuestro corazón,
de pronto... ahí está sin haberlo ido a buscar
hallándolo... por azar, casualidad... qué más da!!...
Qué curioso verdad?...
Ocurre os lo puedo asegurar.


Hay amores que nacen bruscamente
instalándose en nuestra mente sin,
saber el porqué sí o el porqué no
curioso, verdad?... pero se da...
y se da... de tal manera... sencilla,
espontánea con tanta ternura y verdad
que lo hace mágico, real.


Hay amores que viven, renacen,
de manera constante, aún en esa distancia
haciéndolo si cabe más intenso,
porque así se siente y se sabe...
anidando en nuestro interior,
llenando éste de una inmensa satisfacción.


Hay amores, que son... como brisa suave
y aquello, que sin saberlo, fue de repente
poquito a poquito fue creciendo...
y en ese crecimiento se ha ido aposentado;
una ternura infinita, que casi raya la locura,
pero bendita locura, que hace a dos seres vivir
para el otro y para si, ni primero ni después...


Hay amores que besan y acarician,
la piel de nuestro sentir de esa manera,
tan primorosa, cuidada, sentida,
que esos momentos nunca quedarán a la deriva,
esas manos, entrelazadas, anudadas, que sin decir...
...nos están diciendo, un todo, su ternura y su sentir...


Hay amores que son constantes
viviendo así en nuestro interior.
Hay amores que sentimos dulcemente,
y eternamente sin percatarnos...
vamos notando su cadencioso sabor,
nos impregna su aroma que emana...
...de nuestra esencia tan llena de ese infinito cándor...




ANA BELEN DERROCHE ACTUACION EN LA 2


jessibelen

22 mar 2012

La Mar...


Por qué ese miedo al sufrimiento

cuando hay un sentimiento;

tan profundo, lleno, sincero,

que incluso en la distancia

a su modo va creciendo,

y no se puede parar, es...

por ese hermoso sentimiento

lejos y al mismo tiempo

tan cerca que casi

se puede tocar, percibiendo

como si fuese tangible.

El Amor es como la mar

Algunas veces:

... llega en paz

... calma

... armonía

... sosiego

Otras veces:

... llega brava

... enfurecida.

Sin embargo

habiendo esa

perfecta conjunción

entre dos almas,

que sin ningún esfuerzo

cuando estando juntas

pasa el tiempo... sin sentir

por qué será.

Es fácil... se da

una ternura sin igual,

porque son dos almas en una...

disfrutando al compás del otro,

por ello desechemos

ese temor al sufrimiento,

y vivamos ese sentimiento:

tranquilo, pausado, sosegado.

No hacen falta promesas

porque se quiere así...

disfrutar de la ternura

que en esos momentos,

se da de una manera tan llena

que el tiempo transcurre

sin sentir y quizás no siendo tanto

es como si fuese infinito,

porque esas dos almas

en una... lo han llenado por completo.



Newoceanflower2008

19 mar 2012

Azul...



Azul...



Allá... puedo divisar un claro horizonte.

Oculto, tras la mar, y azul.



Rocas imperecederas.

Olas salpicando que vienen y van,

al vaivén de la marea.



Un cielo azul bajo una capa de estrellas,

Que siendo tan límpido, me hace, sonreír a mí.



Desconocidos destinos que pretendo imaginar.

Repetición sin fin de vidas paralelas.



Días azules en una vida azul.

Así, es el amor, azul.

La nota de color que necesitas

para seguir viviendo.



Alegría tras el amor,

amor tras la alegría.

Azul sobre azul.

Exquisita agonía.



Profundidad sin fin,

en el inmenso infinito,

y finito en un instante.



Vives porque amas,

amas porque vives,

y el círculo se cierra tras de ti.



Azul claridad sobre azul.

Alegre primavera,

que prosigue al invierno.



Claroscuro que te alumbra.

Alegría ante el amor,

dolor ante el temor,

negro sobre gris,

azul sobre azul.

Amor.



La vida me ha devuelto la esperanza.

Rescatando del olvido sentimientos

que parecían muertos.



Recibo al aire al entrar en mi garganta,

y al viento que atrae a mí las olas,

oigo la mar chocando con las rocas.

Quedándome ensimismada.



Continúo ante las rocas de la vida,

soñando con futuros alcanzables.

Por más garrotazos que recibes

la vida se aferra al horizonte

que se muestra total e inescrutable.




16 mar 2012

La Luna...



Luna

Contigo hablo todos los días,
eres mi fiel confidente,
te miro, me miras,
en esas miradas nos sentimos una:
comprendiéndonos, adivinándonos,
sin necesidad de emitir palabra.

No me juzgas sólo escuchas,
atenta a mi mirada,
nuestras pupilas se dilatan,
diciéndonos en ellas sin decir nada.

Eres mi sol para mí,
a pesar de ser luna,
sintiéndome reconfortada,
en tus cálidos y tiernos destellos,
a la noche en esa hora tan mágica.

Eres la soberana de mis noches,
me brindas tu compañía,
sin exigirme a mí nada,
alumbrándome en mis sueños,
como canción de cuna o una nana.

Reflejo en la mar,
zafiro aguamarina,
que a mi ventana asomas
viniéndome a alumbrar,
me voy quedando dormida,
en tu regazo, sitiéndome protegida.

Hasta mañana, luna de mi vida,
eres mi más grata compañia,
porque sólo escuchas,
sin preguntarme a mí nada.
Sabes e intuyes,
que soy muy celosa de mi alma.




trichonee

14 mar 2012

Mi Alegría...


Mi Alegría...

Eres mi Alegría,
Tus límpidas miradas,
Que me hacen vivir cada día de mi Vida.

Eres como una paleta de colores,
Dando brochazos tiernos allá y acá.
Sin pedir nada más.

Tiñes la Vida de dicha,
Y me siento muy feliz,
Porque ello es así...

Endulzas mis tristezas,
Tornándose en algarabías,
Haciéndome vivir cada día,
Como el último en “Alegría...”

13 mar 2012

El lorito Crispín...

El lorito Crispín...

Érase que se era un lorito de nombre Crispín. Era un pájaro excepcional puesto que tenía unas plumas que se asemejaban al raso verde, rojo, amarillo dándole un toque muy bonito. Los ojos preciosos de color negro. Un pico hermoso de color amarillo. Crispín era además un lorito muy listo, pero terco, insoportable, caprichoso y desobediente como algunos niños.
- ¡Quiero galletas, galletas!
Y había que darle galletas.
- ¡Sobaos! ¡Quiero sobaos!
Doña Catalina, su dueña, era ya muy mayor. No tenía hijos, estaba sola y claro adoraba a Crispín en demasía.
Le decía:

- Anda - ¡La patita!
Y Crispín todo cuentista, sacaba la patita entre los barrotes de su plateada jaula.
Con los demás tenía un genio endiablado, y era tan maleducado, que todos le huían .
- ¡Hola señor gordo! - Decía a un pobriño que frecuentaba la tienda de comestibles de Doña Catalina. Luego llegaba una señora que se estaba quedando calva y Crispín venga a insultarla.

La pobre Señora Catalina se sonrojaba toda ella de la vergüenza.

- Pero, Crispín, ¿Cómo eres tan malo?
- Porque sí. (Era insoportable)
- Mira, chatín, que no te voy a dar ninguna golosina.
- ¡Ja... ja... ja!! - Se retorcía, Crispín, columpiándose, en su jaula plateada.

Sucedió que solía ir a la tienda la niña Alejandrina, muy linda, pero también muy geniuda, terca y caprichosa...

Alejandrina odiaba a Crispín y el lorito a ella. Verla entrar en el ultramarinos y empezar a insultarla todo era uno: ¡Fea! ¡Fea! ¡Fea! Tres veces... ¡Fea!

Alejandrina... tenía muchas ganas de acercarse a la jaula plateada, pero su mamá de nombre Armonía, y doña Catalina lo impedían.

- ¡Que es muy malo! Con ése... pocas bromitas.

Una tarde, Alejandrina, aprovechó un descuido. Miró cara a cara a Crispín y le dijo:

- Anda, llámame ahora fea, horrible loro...
- ¡Fea, fea, fea y tres veces fea!...
-¡Yo fea! No tienes vista, Crispín. Has de saber que mi mamá dice que tengo unos ojos preciosos como dos soles y todo el mundo dice que soy guapísima.
Para que rabies: ¡Muy guapa!
- ¡Ja... ja... ja!
– Se rió el lorito.

- Alejandrina le contestaba... Claro y alto...
- Mira tú, que tienes cuatro plumas, y mal puestas, y un pico... que parece que vas a segar, y además eres muy sucio.
- ¡Ja... ja... ja!!...

Envaléntonada, Alejandrina ordenó con imperio.

- ¡La pata! Dame la pata, pero que ahora mismito.
- ¡Toma!
- Respondió Crispín... clavando su pico en el dedito tierno de Alejandrina, del que brotó sangre.

- ¡Ay... ay... ay!

- Te está bien empleado
– Dijo su mamá
– Para que escarmientes, y no seas tan desobediente, y traviesa.

Aquella noche Alejandrina no durmió. ¡Que rabia tan grande tenía al loro!
Quería vengarse de él. Sí, señor, vengarse... Tuvo reunión con sus amigas, y al fin encontró su triunfo. Le daría perejil. Todas creían que le iba a sentar mal a Crispín.

- Mamá. ¿Me das un poquito de perejil?
- ¿Para que quieres tú perejil?
- Es que estamos jugando a las comiditas. Dame mucho, mucho...

Despacio y sin ser vista, se acercó a la jaula...

-¡Fea! Gritó Crispín.

Alejandrina no contestó. No hizo más que dejar el ramito de perejil. Crispín se lo comió.
Alejandrina todo el día estuvo nerviosa. Un algo que todos llevamos dentro le decía:

- Has sido una niña mala. No debemos hacer daño a nadie. La venganza es una cosa muy fea.
Pensaba en Crispín y lo veía todo malito y casi ya muerto.

- ¡Ay, mamaita! Que he sido mala, muy mala; he dado perejil a Crispín.
- ¿Perejil al loro? ¡dios mío! Pues ya se habrá muerto.
Vamos a casa de Doña Catalina, veremos si hay remedio. Llegaron anochecido. Doña Catalina, tenía puesto su traje de noche, es decir; su pijama. Se acostaba como las gallinas muy pronto.

- ¡¡ Tan, tan, tan!!
- ¿Quién es?

– Dijo Doña Catalina. Abrió la puerta...
Y... Alejandrina cayó de rodillas.

- ¡Ay, señora! Qué pecado más gordo he cometido. He dado perejil a Crispín porque me hizo sangre con su picotazo...

Doña Catalina se asustó toda...

Entraron temblorosas. Allí estaría frío y rígido el lorito. Pero... sí... sí... Crispín tenía muy alegres sus ojillos, muy fuerte el pico, y cantaba muy alto. En cuanto vio a Alejandrina comenzó a decir:

- Dame perejil... Perejil... Pe... re... jil...

Todas rieron contentas y Crispín vivió muchos años.
Alejandrina nunca olvidó el picotazo en su dedito de aquel loro llamado Crispín, que cada día tenía las plumas más verdes. ¡Claro, por haber comido perejil! ¡Lo saben todos los loros!...


P.D. Este cuento fue realidad... todavía me duele el dedo...

10 mar 2012

Sentimiento...

Sentimiento que va conmigo en ese caminar.
Sentimiento que percibo en cuanto comienza el día al despertar.
Sentimiento que como flores dan colorido a este mi corazón.
Sentimiento que llenas de fragancia como el aroma de mis flores.
Sentimiento que poquito a poco se va agrandando en mi interior.
Sentimiento que me acompaña durante todo el día desde la amanecida hasta la anochecida.
Sentimiento que está en mí y no puedo disimular.
Sentimiento que endulzas la pena cuando ésta quiera anidar en mí.
Sentimiento que me haces abandonar la razón.
Sentimiento que hace que le haga más caso al corazón.
Sentimiento que te vas meciendo en mí acunando mi pasión.
Sentimiento que vas en busca siempre de la verdad.
Sentimiento que vas en busca de la paz.
Sentimiento que apartas de mi toda angustia y ansiedad.
Sentimiento que florido pareces eterna primavera dentro de mí.
Sentimiento que me hace interiorizar buscando la claridad.
Sentimiento que hace que huya de esos momentos de profunda oscuridad.
Sentimiento que me ayuda tornando la impulsividad por tranquilidad.
Sentimiento que en mí te aposentas y te noto con ardor.
Sentimiento que te ahogas cuando no ves a tu amor.
Sentimiento que en mi crece cuando sientes de otro el calor.
Sentimiento que eres dicha y a veces dolor.
Sentimiento que eres gozo, llanto, risa, alegría y quemazón.
Sentimiento que eres brisa al amanecer.
Sentimiento que eres viento a la atardecida.
Sentimiento que te cobijas en mí a la anochecida.
Sentimiento que cuando a la madrugada no me puedo dormir me haces compañía.
Sentimiento que eres la máxima pureza de un mágico cándor.
Sentimiento hoy te nombro porque tu nombre es Amor.

7 mar 2012

Voy a Cantar y Danzar...



Voy a cantar y danzar...

Voy a cantar y danzar con ganas en la calma
en libertad, acompañada de dulzura, en la aventura
esperando a que no haya ninguna flor en desventura,
porque en amor hay locura siendo lazo que ata al alma.

Dentro de mi ser siento la vida
en llama reflejada y que brilla
a la vera del rescoldo de ceniza sencilla
esperando a ver esa luz encendida.

La ceniza se convertirá en llama
siendo el amor una alegría en su desvarío
dando su flor en cada rama.

La llave abrirá la puerta fría
de la estancia, la cubrirá, de amor,
y el espejismo, se hará fe, frente a la realidad vacía...



avi92

5 mar 2012

Silencios...



Silencios

Hay silencios que llegan en volandas,
expresión de mil palabras,
pareciese que no dicen,
siendo brisa perfumada,
colándose de rondón por cada rendija del alma.

Son sensaciones, múltiples conversaciones,
ahí están como calladas, agazapadas
cuando en realidad van cantando,
al ritmo cadencioso de la palabra susurrada.

Penetrando suavemente,
como no diciendo nada.
Sólo hay que estar atentos y saberlas escucharlas,
ellas tienen en su fondo un canto silencioso,
haciéndose misteriosa su palabra.

Cuando plasmamos letra a letra,
sin emisión de sonidos
éstos se van haciendo,
verdaderos cánticos,
en su trinar al oído.
Llegando así a nosotros,
para ser entendidos.

Vuela, silencio, vuela,
como paloma mensajera,
trayéndome tú así a mí,
noticias ansiadas de ti.



Hamp32