Mis sentires…
Mis sentires se balancean en columpio desde su sino
siendo pájaro cantor con alegres trinos antes de la furibunda tormenta.
El corazón siente un vuelco al estruendo de rayos y se atormenta,
asustándose al desvarío de relámpagos en su camino.
Se va disipando el estruendo mortecino,
el jilguero vuelve a entonar sus cánticos como clavel a sabor de menta.
A la luz de la luna llena de sal y pimienta,
oyéndose sonidos melodiosos a la ribera del reino.
Mejilla a mejilla recorro tu espacio infinito,
y el fuego nos va atravesando con sus cosquillas
en cálida placidez de hito en hito.
Vuelve a reinar la calma como lindas coquillas,
mirándonos, atravesándonos, beso a beso infinito en su finito
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7 comentarios:
Calma aún más placentera si se disfruta entre la complicidad de unas miradas y el calor de unos brazos.
Muy bonito, me ha gustado mucho.
Besos muy cariñosos
P.D.- Gracias por tu comentario.
Por cierto, me encanta la foto que tienes de la catedral de Salamanca, mi tierra natal.
las tormentas no son tan malas, es que a veces iluminan demasiado, y te enceguecen otras tantas...
Un sentir que busca el cobijo, la mano que sostenga, la mejilla que acoje la otra mejilla, la cercanía en los momentos que la tormenta interior, exterior, se hace presente en la vida, haciendo sentir miedo. Nada mejor que buscar refugio que otorgue al ser otra vez la calma y que mejor que un beso infinito, bajo una sombrilla complice.
Bello poema, me has hecho sentir esa tormenta y el deseo de cobijo.
Abrazos,
Anouna
Hola Maite, me gusto mucho este poema, espero estés mejorcilla y abrígate que hace mucho frio.
Besos.
Maite el poema entero es una delicatessen, algo especial. Pero permíteme quedarme con una metáfora: mejilla a mejilla, de las mejores que he leído.
Abrazos.
Sentido poema de sentires y sensaciones.
Besos
Narci
Hola cielo unos bellos sentires como esta preciosa musica
te quedo preciosa la entrada
un beso
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